Tras el cónclave de intendentes oficialistas del cual ayer formó parte el gurú político de Mauricio Macri, aime Duràn Barba, mañana al mediodía el presidente de la Cámara de Diputados de la Nación y exintendente de Carlos Tejedor, emilio Monzó junto a la gobernadora bonaerense, Marñia Eugenia Vidal, volverán a almorzar en un hotel de Capital Federal.

El encuentro había quedado pendiente de la semana pasada cuando horas antes de que se llevara a cabo, la mandataria provincial se vio aquejada por un virus y debiò suspender la cita.

En el mundo de la política bonaerense, y sobre todo en la Cuarta Sección Electoral (lugar de origen de Monzó), los pormenores del almuerzo son esperados con ansiedad debido a que se especula con una fuerte influencia del tejedorense en el armado de las listas legislativa spara esta región.

Son conocidos los rumores de interna en las que uno de los armadores de Mauricio Macri se vio envuelto con la gobernadora y otros alfiles del gabinete nacional, pero, según trascendidos, Vidal busca hacer jugar a todos los actores en la Provincia.

Con la imagen en alza de CFK como fantasma, en Cambiemos toman las elecciones de medio término con un caracter plesbicitario y un traspié de legisltivo podría significar un duro golpe para Vidal y el armado oficialista. En este sentido, la figura de Monzó puede ser de utilidad a la Gobernadora para sellar esa diferencia que en el interior bonaerense, ella sola le saca al kirchnerismo.

"Ambos se necesitan", le supo decir a Cuestión Política uno de los armadores que Monzó tiene en la Cuarta Sección Electoral tras reconcoer que "existieron fricciones pero son salvables".

"María Eugenia quiere marcar su diferencia en la construcción política de Muricio Macri y sabe que en la provincia que gobierna, las relaciones que puede tener Monzó con diferentes intendentes peronistas significa un capital político que sería una picardía rechazar", consideró a este portal la misma fuente.