Los referentes de los comités radicales de los 19 distritos de la Cuarta Sección Electoral se vieron las caras en Bragado donde Salvador fue la visita estelar para bajar línea sobre lo que el partido pretende a nivel bonaerense: evitar las internas.

Por tal motivo, días atrás habían adelantado que sólo aeptarían una lista en las contiendas municipales. Y eso significa que aquellos que quieran disputar el poder interno deberán presentarse con boleta chica.

De este modo se cristaliza el corrimiento de la UCR disidente. Es decir, la de todos aquellos que no comulgan con el frente Cambiemos que, en la región del noroeste bonaerense, es la mayoría.

"Los radicales somos parte de Cambiemos porque somos una de las patas fundadoras de este espacio", resaltó, como idea madre, Salvador a los correligionarios al tiempo que insisitió en el argumento de que "para fortalecer a la UCR es necesario fortalecer Cambiemos".

Del encuentro, además, participaron otros dirigentes de peso como el actual diputado marplatense, Maximiliano Abad, otra de las líneas que afloró dentro del radicalismo y que, relegó el poder que hasta hace un tiempo atrás ostentaba Ricardo Alfonsin, hoy más situado en un discurso que a base de cotraponer las medidas neoliberales del espacio gobernante busca aglutinar a todo el radicalismo desencantado con Cambiemos.

Por la Cuarta Sección Electoral también hubo pesencia de intendentes como Víctor Aiola (Chacabuco) y Franco Flexas (General Viamonte) a los que se sumaron diputados como Jorge Silvestre.