Las polémicas declaraciones de Juan José Gómez Centurión relativizando el genocidio de Estado de la última dictadura atentaron contra la estrategia de la Gobernadora María Eugenia Vidal y volvieron a generar una interna en Cambiemos. Cuestión Política te cuenta por qué.
Las declaraciones del titular de la aduana, Juan José Gómez Centurión, relativizando el genocidio de estado perpretado por la última dictadura militar, siguen generando movimientos políticos. En esta oportunidad, trascendió que la gobernadora Vidal fue quien intervino en el asunto y mandó a Gómez Centurión a pedir disculpas públicas y a diferenciar sus opiniones personales de lo que es la postura institucional del gobierno de Cambiemos.
El enojo de Vidal tiene sentido. La gobernadora habría llamado furiosa a Gómez Centurión para evitar que sus expresiones dañen la estrategia que la gobernadora plantea de cara a las elecciones intermedias que se vincula a sumar a todos los intendentes de sesgo peronista.
El arte de construir política y acercar intendentes peronistas con mucho sigilo se puso en tensión luego de las declaraciones de Centurión. De ahí la bronca de la gobernadora.
Es que Vidal tiene que hacer equilibrio entre la necesidad de contener la siempre comflictuada provincia de Buenos Aires, y la pobre gestión del presidente Mauricio Macri a nivel nacional.
Mientras Macri considera que la polémica en torno a las declaraciones de ex carapintada le sirven de escudo para tapar la crisis económica, el ajuste, el endeudamiento, el tarifazo y la falta de inversiones; Vidal entiende que Gómez Centurión le resta en su intención de realizar alianzas con intendentes peronistas.
Macri, por su parte sostiene que el caso de Centurión es muy similar al que atravesó el PRO con el caso de Darío Lopérfido, ex ministro de Cultura de la Ciudad que había negado el número de desaparecidos, algo que también hizo el titular de Aduanas hizo en la misma entrevista en la que negó un plan sistemático de desaparición de personas.
Vidal teme que este tipo de accionar la arrastra para abajo en su intención de voto. Por eso juega al límite de la diferenciación. Vale recordar, que días atrás, el propio presidente "le marcó la cancha" a Vidal en un acto en ciudad de Buenos Aires junto al Jefe porteño, Horacio Rodríguez Larreta.
El presidente dijo en esa oportunidad que: "Gracias Horacio por invitarme a participar en el comienzo de esta obra maravillosa, que la estamos haciendo para tenerla más cerca a María Eugenia ¿no es cierto? Si no, se va a portar mal si la dejamos tan lejos allá en La Plata. Va a poder ir y venir más rápido" .
Habrá que esperar para ver si este tipo de movimientos de diferenciación son esporádicos o parte de una interna que con el paso del tiempo y el calendario electoral que se acerca pueden recalentarse. Por lo pronto, el equilibrio de Vidal resulta interesante, no por casualidad es una de las dirigentes con mayor imagen positiva del momento.