El expresidente de la Cámara de Diputados de la Nación lanzó su campaña callejera y uno de los distritos elegidos fue la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. El detalle de la interna opositora.
En las últimas semanas, el expresidente de la Cámara de Diputados de la Nación, Emilio Monzó, vio perder terreno en la estructura de la oposición. El nuevo escenario para Juntos por el Cambio se dio de la mano del la finalización de la interna de la Unión Cívica Radical y la reaparición pública de María Eugenia Vidal.
Vale recordar que, en la disputa por la conducción del partido centenario, Monzó fue uno de los derrotados al apoyar abiertamente a Gustavo Posse, intendente de San Isidro. El alcalde del Conurbano cayó ante el diputado Maximiliano Abad, que contó con el acompañamiento de Jorge Macri, Vidal, y Elisa Carrió, entre otras figuras.
De esa manera, el monzoismo retrocedió varios escalones en una estructura que se da por contado que no tendra a Vidal en la cabeza de la papeleta para la diputación nacional y con un escenario de internas. Sin embargo, las posibles Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias para Juntos por el Cambio no lo ubican como uno de los nombres en disputa.
En ese sentido, desde el macrismo bonaerense apuntan al monzoismo y sus decisiones en la última etapa como uno de los motores para marginarlos en la interna. Así, contabilizan la ausencia de acompañamiento electoral, la ruptura del bloque legislativo, y el apoyo a Posse en la interna radical.
Como si fuera poco, en los últimos días, Nicolás Massot, alfil de Monzó, devolvió el golpe con acusaciones directas a Jorge Macri como uno de los responsables de la derrota electoral. En ese sentido, la necesidad de un alto fuego con vistas a las elecciones, parece estar cada vez más lejos.
Ante dicho escenario, en los últimos días las líneas que responden al dirigente de Carlos Tejedor lanzaron la militancia callejera. Entre los distritos escogidos para copar las calles con el mensaje: "el camino es el diálogo", apareció la Ciudad Autónoma de Buenos Aires. Además de comunas de peso como Mar del Plata.
En la oposición aseguran que la porteñización de la campaña del dirigente es una apuesta a marcar presencia cerca de su última casa, el Congreso de la Nación. Así, aseguran que nada tiene que ver con el aceitado vínculo con Horacio Rodríguez Larreta y la posibilidad de modifcar el domicilio.
De esa manera, mientras Monzó busca sobrevivir a la interna opositora y conseguir un lugar para la disputa en las urnas, comenzó con la militancia en las calles, bonaerenses y porteñas.