El presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal recorrieron hoy en la ciudad de Luján una obra denominada "bypass", conformada por una autopista sobre la ruta nacional 5, de 8.500 metros de extensión y dos nuevos puentes.
La nueva obra permitirá descongestionar uno de los peores "cuellos de botella" del país, por donde circulan más de 18.600 vehículos por día, permitiendo ahorrar 45 minutos de viaje en hora pico, según se informó. Además, la nueva variante de la ruta desvía el tráfico fuera del casco urbano de Luján y enlaza de manera directa y segura con el Acceso Oeste.
La vista de los mandatarios duró apenas 20 minutos y no hubo actos ni inauguración oficial, la cual se realizaría en los próximos días. Solamente conversaron unos instantes con un grupo de vecinos autoconvocados que vienen reclamando desde hace tiempo por la ruta 5.
Según se informó, se trata del primer tramo de la autopista Luján-Bragado, un corredor de 143 kilómetros que demandó una inversión de más de 14.800 millones de pesos, que financia el ministerio de Transporte de la Nación, a través de Vialidad Nacional.
El "bypass" a Luján es una obra emblemática que los vecinos de la zona esperaron durante más de una década. La variante comenzó a ejecutarse en 2001 y se avanzó hasta los 5.000 metros de extensión. Dos años después, cuando solo restaban 400 metros para enlazar el primer tramo con la RP 47, los trabajos fueron abandonados y nunca más avanzaron.