Se trata de ARSA, que fabrica yogures y postres para la firma SanCor. Alerta por posibles despidos o licencias sin goce de sueldo.
La feroz caída del consumo y la consecuente merma en la producción, dejaron a la fábrica láctea ARSA en una compleja situación económica. Ahora, los trabajadores temen por posibles recortes de personal dado que el impacto generó que estén cobrando el salario desdoblado.
ARSA tiene una planta en la localidad de Arenaza, partido de Lincoln, donde ya comenzaron a sentirse los coletazos de la crisis económica, dadas las medidas del Gobierno nacional. Lo curioso es que uno de los trabajadores y concejal de La Libertad Aavanza en el distrito, Luis Castillo, reclamó por la situación.
"Somos 218 personas; 218 familias que dependemos directamente de ese trabajo", planteó Castillo en diálogo con Somos. En ese plano, marcó que los delegados del gremio Atilra tuvieron una reunión con los representantes de la firma, pero lo que les dijeron no fue alentador.
Castillo señaló que "puede haber una reestrcuturación, esto implica despidos; y puede haber licencias pero sin goce de sueldo, eso nos pegaría muy fuerte".
La empresa cuenta con otra fábrica similar en la provincia de Córdoba y, según las versiones que corrieron entre los trabajadores, las dos "están con muy baja producción".
"Eso lo estamos sufriendo. Queremos producir para después cobrar como corresponde", marcó el libertario Castillo. "Nosotros cobramos el 40% los primeros días del mes y el restante 60 lo cobramos después del día 20, eso complica a las familias", agregó.
Finalmente, planteó que "a través de nuestros referentes elevamos la información y llegó al Ministerio de Economía para ver si pueden ayudar en esta situación".