Después que la Provincia diera marcha atrás con la aplicación de su marco sobre utilización de agroquímicos, reclaman que el intendente de Lincoln, Salvador Serenal se mueva en el mismo sentido y desista de un proyecto en línea con la resolución bonaerense.

En concreto, el jefe comunal había impulsado en 2017 un proyecto de utilización de agroquímicos que fue seriamente cuestionado en la Comisión de Medio Ambiente. La oposición consiguió aprobar en 2018 un dictamen de mayoría con cambios, luego aprobados por el Concejo. Sin embargo, Serenal vetó la ordenanza.

La oposición defendió los cambios que buscaban determinar zonas de exclusión y amortiguamiento para zonas urbanas, escuelas rurales y cursos de agua.  Tras la polémica, Serenal defendió su veto ante la resolución del Ministerio de Agroindustria. La norma fue ingresada al Concejo junto al decreto de veto 3869/19 al Concejo.

Ahora, Ruffa se manifestó a favor de que Serenal vete a misma ordenanza que iba en la misma lógica de la resolución de la Provincia: que se suspendió por un año su vigencia en zonas linderas a instituciones educativas, ríos y pueblos.

“Está claro que existen desde la Constitución Nacional, en su art. Nro. 41 y la Constitución Provincial, en su art. Nro. 28, el resguardo del medio ambiente y la salud de los habitantes y que por favorecer a los grandes intereses de las multinacionales, el poder político de cambiemos en Lincoln lo desconoció, como así también lo desconoció la Provincia”, sostuvo la edil María Mercedes Ruffa.

Ruffa, concejal de Unidad Ciudadana y titular de la Comisión de Medio Ambiente, argumentó que el trabajo realizado para promover una ordenanza se basó “en decisiones coherentes” y en pos de un “ambiente más sano y libre de químicos que afectan indefectiblemente la salud de los habitantes del Distrito”.

Para la edil linqueña, ese “principio debía estar por encima de los intereses particulares de quienes comercializan con dichos productos, cuestión que no entendíamos que un Intendente no nos proteja a sus habitantes”.