Tras el anuncio de paro por parte de los trabajadores que recolectan los residuos urbanos en Carlos Tejedor, el intendente de esa ciudad, Raúl Sala (Cambiemos), aseguró que "en tres meses no se puede pedir cosas que no se habían pedido antes" y por ese motivo dejó entrever que "algo más debe haber", en clara alusión a un motivo político o extra laboral. El tejedorense aseguró que de a poco va corrigiendo cosas y que no echará mano a los arreglos personalizados: "a igual trabajo, igual remuneración". No descarta ser el mismo quien se ponga a juntar los residuos que los vecinos generan en sus casas.

Sala no entiende. El intendente de Carlos Tejedor recibió ayer la noticia de que el personal afectado a la recolección de residuos había decidido no presentarse a realizar su trabajo y no ocultó su sorpresa al dejar entrever que existen razones extra laborales para que se haya adoptado esta medida. 

"En tres meses de gestión no se puede pedir cosas que no se habían pedido antes. Y el descontento venia de mucho antes del 10 de diciembre. Entonces si deciden hacer paro, si deciden no convocarse en el lugar de trabajo? Algo más debe haber porque si antes no se hizo ¿Por qué hacerlo en esta gestión?”, aseguró Sala a la Radio Municipal.

Además, el tejedorense afirmó que por parte de los empleados municipales "nunca hubo un pedido formal por escrito, ni una charla" y que desde el municipio estaban predispuestos a brindar una aumento de $1.000 "en tanto y en cuanto, se hicieran las horas extras que se trabajaban, haciendo eco a la que vengo diciendo y alusión a lo que se dijo en campaña”, explicó.

Y agregó. “Se reconoció por parte de ellos, que había sido una medida apresurada, que en realidad no debían haberla realizado. No hubo mala voluntad del Ejecutivo. Si ellos accedían de hacer las horas extras les iba a dar los $1000 porque reconozco que es un trabajo insalubre”.

En este sentido, Sala resaltó que desde que asumió se están "corrigiendo desprolijidades anteriores" ya que "antes había arreglos personalizados" y ahora "tenemos abierto el diálogo en todas las áreas con todos los empleados municipales. Acá no hay ánimo ni de ofender, ni de lastimar, ni de perjudicar, ni de beneficiar, absolutamente a nadie. Solo hay que buscar el equilibrio".

“Vuelvo a repetir y soy claro: se van a pagar las horas que se trabajan. No se van a hacer arreglos personalizados con algunos o con cada uno de los empleados municipales. ¿Quieren ganar más?, tienen que trabajar”, enfatizó el intendente.

Al respecto, Sala aseveró: “Tenemos que ser todos complacientes, y no podemos hacer maravillas cuando no tenemos recursos. Yo necesito igualdad y que todos los empleados municipales se sientan revalorizados. Igual trabajo, igual remuneración”.