Cuando nadie lo esperaba, ayer el exministro del Interior de la Nación, Florencio Randazzo, reapareció activamente en la escena política junto al exministro de Economía Roberto Lavagna, ambos sin armado propio en la actualidad. Salieron con críticas al Gobierno nacional pero alejados de la posibilidad de integrarse a Juntos por el Cambio. 

Lavagna contó que en su encuentro profundizaron "las coincidencias en temas prioritarios para el país como el desarrollo, la producción, el sistema impositivo, y en poner la prioridad en GENERAR EMPLEO a través de las PYMES facilitándoles la posibilidad de incorporar trabajadores.  Hoy más que nunca nos preocupa como parte de la sociedad que extrememos la seriedad y la eficiencia en la lucha contra la pandemia de Covid-19". 

Randazzo fue más escueto. "Gracias Roberto por la invitación y por tu vocación para pensar soluciones en conjunto de cara al futuro del país", se limitó a expresar el exintendente de Chivilcoy y compartió las palabras de Lavagna respecto de la reunión. El hecho reavivó los rumores sobre una tercera vía peronista, alejada del oficialismo y los "compañeros" integrados a Juntos por el Cambio. 

Asimismo, el encuentro no cayó nada bien en la Cuarta, más precisamente en Chivilcoy, donde gobierna Guillermo Britos, exaliado de Lavagna y enfrentado con Randazzo. Si bien el Intendente no se expresó públicamente, el gesto del exministro de Economía terminó por decretar la disolución de Consenso Federal, armado que le permitió a Britos retener el poder en 2019. 

A principios de marzo Randazzo había aparecido en un Zoom con militantes, con fuertes definiciones contra el Presidente. Allí había dicho que “Alberto Fernández es un presidente sin poder político porque Cristina Kirchner tiene un proyecto familiar” y se había pronunciado a favor de generar una “tercera vía que rompa la polarización kirchnerismo-macrismo”. El encuentro con Lavagna se leyó en ese sentido.