El Ministro de Economía anunció, entre otras medidas, que aquellos productores en zona de emergencia y que su actividad principal sea agropecuaria y/o ganadera, accederán de manera automática a los beneficios de alivio fiscal, sin necesidad de efectuar ningún trámite
El ministro de Economía, Sergio Massa, anunció esta noche nuevas medidas para los damnificados por la sequía, con el objetivo de generar alivio en el sector. El escenario climático adverso, que dejará pérdidas superiores a los 20.000 millones de dólares, está generando preocupación en el Gobierno por el impacto de la problemática en la economía, especialmente en el menor ingreso de dólares mediante las exportaciones.
Desde su cuenta personal de twitter, el funcionario anunció que mediante un decreto y posterior resolución conjunta entre la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y la Secretaria de Agricultura, se determinó que los productores que están en zona de emergencia y que su actividad principal sea agropecuaria y/o ganadera, accedan de manera automática a los beneficios de alivio fiscal que establece la Ley de Emergencia, sin necesidad de efectuar ningún trámite.
Hay que recordar que en las últimas semanas se multiplicaron las críticas de los dirigentes del campo por las “trabas burocráticas” que impiden que las decisiones que adoptó el Gobierno en relación a la sequía, en muchos casos todavía no llegaron a los productores. Como así también se demoran las declaraciones de emergencia por parte de los municipios y las provincias, y luego las homologaciones por parte del Ejecutivo nacional.
“Estamos ante la sequía más grave de la historia argentina en la que vimos cosechas enteras perdidas, animales sin alimento muertos y sobre todo, productores que perdieron el trabajo de todo un año, por eso vamos a acompañarlos con medidas excepcionales para llevar #AlivioAlCampo”, dijo el funcionario, quien además precisó que “las medidas de alivio fiscal para las y los más de 60.000 productores incluyen la suspensión del pago de anticipo de ganancias, beneficios fiscales ante la venta forzosa de ganado y la suspensión de intimaciones y embargos de las cuentas bancarias”.
Al respecto, se informó que el Decreto permitirá a la AFIP establecer un plan de facilidades de pago para que los productores alcanzados por la emergencia tengan la posibilidad de regularizar todo tipo de deuda fiscal en hasta 48 cuotas mensuales. A todo esto, la cantidad de cuotas “dependerá de condiciones equitativas para la normalización de las deudas, considerando el origen y el tipo de deuda que pretende cancelar y la evaluación del grado de cumplimiento de sus deberes formales y materiales”.
Más medidas
Por otro lado, se detalló que se “podrán regularizar obligaciones impositivas y de los recursos de la seguridad social, vencidas o cuya fecha de vencimiento opere en el mes de la presentación del plan de facilidades de pago, junto con sus intereses y multas. Además, al regularizar las deudas previsionales que tengan los productores, se les facilitará tomar créditos bancarios, ya que muchas entidades financieras restringen el acceso al financiamiento ante la existencia de obligaciones previsionales impagas”.
Otra de las medidas anunciadas, son la suspensión de las intimaciones por falta de presentación de declaraciones juradas y pago de obligaciones, los juicios de ejecución fiscal y el levantamiento de los embargos en las cuentas bancarias; el pago de anticipos del Impuesto a las Ganancias; y se otorgarán beneficios fiscales para la venta forzosa de vientres. Además, “la suspensión del ingreso de anticipos correspondientes a los impuestos a las ganancias y sobre los bienes personales, regirá hasta la finalización del ciclo productivo siguiente a aquel en que concluya el estado de emergencia. Se trata de aquellos vencimientos que hubieran sido fijados entre el 1 de febrero de 2023 y la fecha de finalización del período de vigencia del citado estado de emergencia”.
Por último, el ministerio de Economía dispuso la deducción en el Impuesto a las Ganancias por la venta forzosa de hacienda, con el objetivo de que los productores puedan deducir en el balance impositivo del impuesto a las ganancias, el 100 % de los beneficios derivados de la venta forzosa de hacienda bovina, ovina, caprina o porcina. En el caso del monotributo, gozarán del beneficio las obligaciones mensuales correspondientes al componente impositivo cuyos vencimientos operen durante el período de vigencia del estado de emergencia o zona de desastre agropecuario.
La sequía y las altas temperaturas récord de las últimas semanas, impactaron de lleno en la actual campaña agrícola. La Bolsa de Cereales de Buenos Aires proyectó que la producción de soja será de 25 millones de toneladas, frente a los 44 millones de toneladas de la anterior campaña, y una cosecha total de maíz de 36 millones de toneladas, cuando en el ciclo anterior la producción fue de 52 millones de toneladas. A todo esto, la producción total de granos y oleaginosas se estima en 84 millones de toneladas, unas 50 millones de toneladas menos en relación a la última cosecha. Y también hay un escenario complicado para la ganadería, la lechería y las economías regionales.
Días atrás, el Secretario de Agricultura, Juan José Bahillo, mantuvo un encuentro con la prensa donde afirmó que “desde la Secretaria de Agricultura a lo largo de estos siete meses de gestión, hemos aportado más de 40.000 millones de pesos en distintos programas para acompañar a los productores para que puedan seguir produciendo y que mitigar un poco los efectos de la sequía. En la medida que no se resienta la capacidad productiva de nuestros productores, habremos cumplido con el objetivo. Y eso lo lograremos teniendo un Estado que este cerca de los productores y los sectores productivos”.