En General Villegas, el territorio más afectado por el agua, aseguran que será “nula”, mientras que en Junín no se va a poder sembrar en un 40 por ciento del partido.

"La crecida ya pasó, los pueblos están a salvo, pero los campos siguen afectados: el 70 por ciento de las 725 mil hectáreas que posee el partido están con agua, por lo que la siembra de invierno será nula", señalaron desde el INTA de General Villegas.

Según advirtieron, no se puede entrar a los campos, hay agua, las napas están altas y los caminos están intransitables, por lo que habrá que esperar en primavera para sembrar maíz, pero cultivos verdes para ganado, trigo o cultivos de cobertura no van a ser posibles este invierno.

Es que difícilmente se evapore el agua acumulada ya que el tiempo de luz solar se acorta con la llegada del invierno, por lo que al productor sólo le queda esperar la llegada de la primavera.

Cabe recordar que el partido de General Villegas está inundado desde hace 16 meses, debido a las lluvias y al ingreso de agua de las provincias de Córdoba y Santa Fe.

En tanto, el ingeniero agrónomo de Junín Marcelo Rossetti señaló que en el 40 por ciento del partido no podrá sembrarse trigo durante la próxima campaña porque la masa de agua “es muy grande” sobre todo hacia el sur del distrito, donde se encuentra el porcentaje mayor de las hectáreas afectadas.

“La situación no es sencilla, en muchas partes hay mucha agua y por lo menos habrá que esperar hasta el año que viene para poder sembrar”, dijo Rosetti en diálogo con el diario local La Verdad.

Sin embargo, el especialista sostuvo que en el centro y en el sur de la provincia de Buenos Aires los rindes de trigo que se esperan “son muy buenos” ya que esos sectores no han resultado tan castigados por el exceso hídrico.

Cabe destacar que la producción de trigo en la provincia de Buenos Aires aumentó un 52 por ciento con respecto al año pasado y alcanzó su mayor nivel en las últimas cinco campañas, según el Informe de Coyuntura Agropecuaria correspondiente al primer trimestre de este año, elaborado por la Dirección Provincial de Estadística bonaerense, que también destacó un incremento del 4 por ciento en las cabezas de ganado