A una semana del balotaje que definirá quién será el futuro presidente de Argentina, el candidato de La Libertad Avanza, Javier Milei, agita el fantasma de un futuro fraude electoral sin ninguna denuncia formal en la Justicia. 

Días atrás, el dirigente libertario fue entrevistado por el periodista peruano Jaime Baylyn y aseguró que en las elecciones generales del 22 de octubre hubo irregularidades “de semejante tamaño que ponen en duda el resultado”. Sin embargo, desde la Cámara Nacional Electoral indicaron que estas denuncias públicas nunca fueron judicializadas.

Ahora la Justicia Electoral advirtió que La Libertad Avanza no entregó una cantidad “insuficiente” de boletas en la provincia de Buenos Aires de cara a los próximos comicios: presentaron 100 por cada urna cuando la ley autoriza hasta 350. La Cuarta sección no sería la excepción en este deficiente envío de boletas.  

En la resolución que emitió la Junta Electoral Nacional indicaron que “en las entregas efectuadas hasta la fecha, la agrupación ‘La Libertad Avanza’ ha presentado sus fajos con una cantidad sustancialmente menor de boletas, que, en algunos casos, no alcanza a un cuarto de la cantidad máxima sugerida, notándose también en muchos casos que la cantidad de fajos tampoco alcanza a cubrir todas las mesas de los municipios que se están procesando para su entrega al Correo Argentino”.

En ese sentido, informaron que esta situación “obligó a sacar fajos de las bolsas de contingencia, o inclusive restarlos de otros municipios de procesamiento posterior para poder completar las mesas”.

Desde La Libertad Avanza reconocieron que destinaron un promedio de 100 boletas por urna pero aseguraron que tienen “bien armada” la reposición con los fiscales. Además, apuntaron contra la Justicia señalando que con esta advertencia “quiere cubrirse”  ante eventuales hechos de fraude.

En una entrevista con Marcelo Longobardi, Milei indicó que durante las generales detectaron una “serie de irregularidades, de rotura de boletas y demás, en determinados lugares”  y que esa rotura de boletas y desaparición de boletas “ocurre en el lapso horario que va desde las 8 de la mañana a las 9 y media”, entonces enviaron menos boletas y decidieron darle más a los fiscales. 

“¿Para qué? Porque así cuando nos roban las boletas, que ocurre mayoritariamente entre las 8 y las 9 y media de la mañana, con el menor número de boletas posibles, y tengamos más boletas para reponer, y poder satisfacer las necesidades de la gente en términos de boletas”, precisó.