La placa que recordaba a José María Martín, militante desaprecido por la dictadura, fue colocada en marzo del 2016 por la Comisión de Derechos Humanos de Rivada en el frente del Instituto América y violentada por desconocidos días atrás.

El hecho se ganó el repudio de opositores y oficialistas que hicieron hincapié en la necesidad de recuperar la memoria frente a esta clase de hechos vandálicos realizados por desconocidos.

Uno de ellos fue el Presidente del Concejo Deliberante local, Jorse Pablo Rosolen, quien vía Facebook sentenció: "Quiero repudiar el acto vandálico sufrido en la baldosa homenaje a José María Martín ubicada en el Instituto América, la defensa de los Derechos Humanos excede las posiciones políticas partidarias y es una tarea permanente de todos y cada uno de nosotros que es necesario fortalecer y construir todos los días". 

Otra voz que se escuchó fue la del presidente del bloque de concejales del Frente Renovador de Rivadavia, Sebastiàn Hernàndez, quien afirmó: "Repudiamos el accionar de quienes dañaron la placa en memoria de Jose Maria Martín que se encuentra en el Instituto América. Todavía recordamos la emotividad del acto en que se llevó acabo el descubrimiento de la placa y lamentablemente hoy nos encontramos con esta situación".

Desde ese mismo espacio, la comunicación oficial del massismo también hizo hincapié sobre este hecho al sostener que "por simple vandalismo o por nefasta intencionalidad, esta clase de noticias nos tiene que hacer pensar sobre la necesidad constante de trabajar nuestra memoria. Algo que es mucho más profundo que declarar inamovibles el 24 de marzo y el 2 de abril, pero -al mismo tiempo- algo que es tan imprescindible como para querer "ningunear" lo más básico que tiene un hecho histórico: sus fechas".

"José María Martín puede ser tachado de una placa, pero nunca borrado de nuestra memoria. Repudiamos esta clase de hechos", puntualizaron.