Este viernes, el ferrocarril San Martín volverá a pasar por las estaciones Iriarte, de General Pinto, y Alberdi, Perkins y Vedia, de Leandro N. Alem, en el trayecto que unen la localidad santafesina con la terminal porteña.
Después de varios años sin el tren de pasajeros en cuatro de las estaciones de la Cuarta Sección, este viernes se reestablecerá el servicio luego del avance de los trabajos desarrollados durante el último año. Se trata de las paradas en General Pinto, Iriarte, y en Leandro N. Alem: Alberdi, Vedia y Perkins.
En concreto, desde la llegada de Alexis Guerrera a la conducción del ministerio de Transporte de la Nación, se intensificaron los trabajos para consolidar el tren de cercanía que llegue desde Junín y hasta Rufino, en Santa Fe. Para ello, se avanzó con el tramo final de las obras en la laguna La Picasa y se sumó la posibilidad de que Trenes Argentinos Operaciones reestablezca el servicio.
Claro está, conforme detallaron, la impronta de la gestión de Guerrera, jefe del Frente Renovador en la región, apuesta a consolidar un tren que brinde respuestas a las necesidades de la vecina y vecinos. De esa manera, se puso en agenda la posibilidad de recuperar el tren de pasajeros en la región.
Por caso, en primera instancia se sumó Leandro N. Alem con tres paradas y General Pinto con una, pero no se descarta que las conversaciones ya avanzadas aumenten la presencia del ferrocarril en los distritos de la Cuarta Sección electoral.
El regreso del tren que une Retiro con Rufino tendrá su punto de partida este viernes y los pasajes están disponibles para la venta hasta el 30 de noviembre con un valor entre cabeceras de 425 pesos para la categoría primera y 510 pesos para pullman. Los pasajeros y las pasajeras pueden adquirir sus boletos vía web con un 10% de descuento, los jubilados con un 40% y las personas con discapacidad que posean CUD (Certificado Único de Discapacidad) en forma gratuita, a través de la página oficial.
Los trabajos de reparación de 13 kilómetros del pedraplén sobre la laguna La Picasa comenzaron en diciembre de 2019 y se mantuvieron durante todo el 2020 y 2021, pese a la pandemia, demandando una inversión total de 200 millones de pesos.