El anuncio de retenciones por parte del Gobierno generó profundo rechazo en las entidades agropecuarias, que abrieron además espacio de intercambio con sus filiales en los distintos distritos para evaluar los pasos a seguir.

La Confederaciones de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y La Pampa (CARBAP) sostuvo, mediante un comunicado, que "no es una buena medida la adoptada, y por lo tanto poco inteligente”, una de los calificativos que había utilizado Mauricio Macri para denostar el tributo en ocasiones anteriores.

CARBAP señaló que “se vuelve a insistir con recetas que no han funcionado” y sostuvo que “Argentina necesita exportar cada vez más y las medidas anunciadas terminan afectando el potencial exportador de nuestro país”,

“Hemos aprendido en estos últimos años que las retenciones no dieron resultados y que cuando se quitaron se multiplicaron las producciones de maíz y trigo”, enfatizaron desde la entidad.

De esta manera, consideraron que “es indispensable para lograr el equilibrio fiscal, promover el crecimiento de la economía liberando el potencial de los sectores productivos”, y pidieron que “al mismo tiempo que se reduzcan en tamaño y gasto los tres niveles de Estados, nacional, provincial y municipal”.

En el plan de medidas del Gobierno, el adicional por derechos de exportación se abonará entre 2019 y 2020. Según se informó, será 4 pesos por dólar en exportaciones primarias, 3 pesos por dólar en el resto de las exportaciones, a la vez que una reducción al 18 por ciento de la alícuota al complejo sojero.

Desde la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC), salieron a cuestionar la aplicación de la medida y la magnitud de la carga impuesta. “Para nosotros claramente implica un aumento de las retenciones a la soja. Si tomás el valor FOB (US$371 la tonelada) y lo multiplicás por 4, es un 11% adicional de retenciones; nos vamos al 29%”, dijo el presidente de la Cámara, Gustavo Idígoras, a la Nación.

Por su parte, Luis Etchevehere, ex titular de la Sociedad Rural y responsable del área de Agroindustria de la Nación, reconoció que “es una medida antipática”, aunque dijo que “el país está en crisis” y remarcó que no hay discriminación. “Todos los sectores que exportan aportan este monto fijo en pesos”, argumentò.