A medida que se acerca el domingo electoral, incrementa aún más la temperatura y Lincoln no está ajena a las internas de los espacios. Es que, mientras muchos intendentes de Juntos por el Cambio trabajan con fuerza el corte de boleta para despegar su suerte de la de Mauricio Macri y María Eugenia Vidal, comenzaron las acusaciones cruzadas.

Claro está, el corte de papeleta a favor de los alcaldes oficialistas perjudica claramente a los rivales de las fuerzas competidoras, desde Todos a Consenso Federal. Así es el caso en el distrito que gobierna el radical Salvador Serenal.

Es que, el aspirante a la intendencia por el lavagnismo, Walter Salazar, puso el grito en el cielo ante el reparto de boletas con la papeleta presidencial de Roberto Lavagna, la bonaerense de Eduardo Bucca y la local de Juntos por el Cambio. Es decir, la boleta cortada y ya confeccionada para la votación del domingo. Incluso, el propio Serenal dio cuenta de dicha situación en sus redes sociales.

Con dicho escenario, las sospechas por el corte de boleta recayeron sobre las mismas filas de Consenso Federal. Ya que, según pudo saber Cuestión Política, el acuerdo para el reparto de papeletas confeccionadas con las dos listas rivales a Todos habría sido realizado por el propio perdedor de las PASO, Alejandro Rebollini.

La sospecha recae sobre el perdedor de las PASO ya que fue, según sostienen, quien recibió las papeletas para ser repartidas desde el último jueves. Así, todos las miradas apuntan a su rol y un eventual acuerdo con Serenal. Sin embargo, el alcalde reniega de dicha hipótesis.

"Estos días, varios intendentes de Juntos por el Cambio hemos visto el reparto de boletas de Lavagna con las de nuestro partido. Esta sucia jugada, no es más que un intento por confundir a la población y tratar de evitar que Mauricio Macri participe del Balotaje. No es la primera vez que vemos acciones antidemocráticas que enturbian el proceso electoral, y siempre vienen del mismo sector que no respeta las leyes ni las normas sociales", sostuvo.