Sancor no es una empresa mas, como suele apuntar el mercado cuando toma decisiones, es la empresa más importante de la provincia de Santa Fé, con casi 80 años de existencia, 70 cooperativas asociadas, mas de 1.500 tamberos, 4.500 trabajadores y más de 22.000 trabajadores indirectos, fue la cooperativa más grande del país y una de la más grande del mundo, entonces no es una empresa mas.

La premisa es salvar la cooperativa, no elegir si son capitales extranjeros o nacionales los que se queden con ella, entonces me pregunto: ¿quieren defender a SanCor o quedársela? Estas son las dolorosas consecuencias que trae el neoliberalismo que representa el gobierno de Cambiemos. Macri les niega la ayuda a los trabajadores del sector por haber firmado un convenio muy generoso con ellos, esto sintetiza a Macri, entonces está claro que el optimismo que pregonan esta únicamente en el discurso oficial.

¿A quién se le ocurre pensar que un hijo de la "patria contratista" va a tomar una sola medida a favor de los trabajadores, de la producción, de la industria nacional? Solo a algún despistado que creyó en el cambio. Y había que cambiar si, posiblemente para corregir todos y cada unos de los errores, pero ese cambio era con la gente adentro, ese cambio era dentro de un rumbo de inclusión y desarrollo económico, sin embargo el cambio nos trajo un ministro de producción que dice que "el verdadero problema de SanCor son sus empleados". 

SanCor es una manifiesta muestra de lo que piensa hacer este gobierno con el aparato productivo de nuestro país: vaciarlo y entregarlo a sus socios empresarios que a su vez son los funcionarios de Cambiemos, es decir: están de ambos lados del mostrador en cada decisión que toman y que afecta la vida de los argentinos. 

Hoy nuestra obligación es ponernos la camiseta de SanCor y el overol de sus laburantes y resistir esta brutal embestida que dejará a miles de compatriotas en la calle si no se revierte la situación. Humildemente digo: SanCor Somos Todos! Fuerza trabajadores!